En conferencia de prensa, familiares de los 137 fallecidos en la explosión de Tlahuelilpan denunciaron la falta de apoyo de parte de el gobierno federal.
La explosión de un ducto de Pemex ocurrió en enero del 2019 en la comunidad de San Primitivo mientras decenas de personas se aglomeraban para recolectar el hidrocarburo.
Ellos exigen que el gobierno federal cumpla las promesas que hizo como comprar el predio de la explosión para construir un memorial a los fallecidos y construir un centro de oración.
Denuncian que no se les ha informado nada al respecto y que el gobierno tampoco ha cumplido en la creación de empleos y actividades productivas para el sustento de quienes perdieron a sus familiares.
Informaron que también han tenido problemas con las visas de quienes aún tienen familiares hospitalizados en Estados Unidos por lo que pidieron ayuda para poder visitarlos.
Las familias de los fallecidos han construido pequeñas capillas a lo largo del ducto que provoco decenas de muertos y heridos y a 3 años de la tragedia exigen que les sean cumplidas sus demandas.